El sábado pasado se llevó a cabo en todo nuestro país, la tercera versión del Día sin IVA, con el cual se buscaba dar un espacio para la reactivación económica, como un punto de desquite para el comercio y también, para estimular las compras decembrinas y evitar que estas se dejaran para la semana del 24.
El llamado que se hizo a los compradores, fue evitar el desplazamiento a los almacenes para hacer las compras y que buscaran los medios tecnológicos para poderlas hacer, con la comodidad de estar en casa y de hacer el pago de manera electrónica, según las ofertas que cada establecimiento comercial estaba brindando.
Y efectivamente, aunque los almacenes de cadena se vieron atiborrados de gente, la gran demanda de compras si se realizó a través del internet, con filas virtuales que pasaron en su memento de las 500.000 personas y con tiempos de espera que superaron las 10 horas.
Hubo momentos en la tarde, que no se dejaba acceder a las plataformas, por lo congestionadas que se encontraban, pidiéndole a los compradores que accedieran a las páginas un rato después, pero siempre con un alto contador de visitas, que solo atinaban a los compradores, a tener mucha paciencia, y que el tiempo gastado en las filas virtuales, se viera reflejado con un muy buen descuento y ahorro económico.
Los datos de este día fueron muy productivos, las compras rebosaron todas las expectativas, los establecimientos comerciales tuvieron su día de desquite y muchísimos compradores aseguraron su aguinaldo.