Cinco municipios del Oriente beneficiados con infraestructura social para retorno de desplazados
Desde el año 2012, un total de 274.829 familias desplazadas por el conflicto retornaron a sus territorios de origen o se reubicaron en otras zonas de Colombia con apoyo de la Unidad para la Atención y Reparación Integral a las Víctimas.
El reto ahora es brindarles sostenibilidad y mejores condiciones de vida a más población que decide regresar a regiones donde hay mayor tranquilidad. Con ese fin la Unidad implementa este año una estrategia para apoyar a los 204 municipios con planes de retornos y reubicaciones ya aprobados.
SegúnYolman Osorio, coordinador nacional de Retornos y Reubicaciones,“se invertirán 40 mil millones de pesos en materiales de construcción, insumos y dotaciones para las obras y proyectosen las líneas de inversión sobre los 8 derechos para la superación de la situación de vulnerabilidad causada por el desplazamiento forzado: Salud, educación, identificación, vivienda, generación de ingresos, atención psicosocial, reunificación familiar y alimentación”.
Agregó que con esta estrategia se pretende asegurar que “estos retornos sean sostenibles, fortaleciendo la infraestructura social y comunitaria para mejorar las condiciones de vida de esta población afectada por el desplazamiento forzado”.
Hasta ahora, las alcaldías de 11 municipios antioqueños, entre ellos cinco del Oriente Antioqueño presentaron proyectos para ejecutarlos en el segundo semestre del año, entre ellos varios priorizados para el posconflicto por los Programas de Desarrollo con Enfoque Territorial (PDET), en cumplimiento del acuerdo de paz entre Gobierno y FARC. Cada localidad aporta la mano de obra calificada y no calificada.
Son estos: San Rafael, San Carlos, San Francisco, Carmen de Viboral y Abejorral por el Oriente y Dabeiba, Cáceres, Caucasia, Urrao, Betulia, Yolombó y Concordia por el resto del departamento.
Algunos de los proyectos formulados son dotación, mejoramiento o adecuación de escuelas, centros de salud, salones comunales, construcción de placas huellas, huertas caseras, proyectos productivos agropecuarios, piscícolas o silvopastoriles.
Como parte de esta estrategia, en Dabeiba también se inició la atención sicosocial para la reconstrucción del tejido social afectado por el conflicto armado,promover el arraigo territorial y la convivencia entre las víctimas retornadas y las comunidades receptoras.